Método Rubio para el Cólico del Lactante

¿En qué consiste el Método Rubio? y ¿Realmente funciona?

Método Rubio

¿En qué consiste el Método Rubio? y ¿Realmente funciona? Esas son dos grandes preguntas que se hace un gran número de padres que se enfrentan al angustioso problema del cólico del lactante. Hoy os traigo una entrevista al profesor Domingo Rubio , creador de un método osteopático destinado a aliviar este problema , el Método Rubio para el Cólico del Lactante.

A pesar de que esta entrevista fué publicada inicialmente en 2008, hace ya casi 10 años, he considerado de interés reflejarla en mi Blog puesto que el tema es de plena vigencia y  aclara con sencillez las preguntas de la mayoría de los padres en palabras del propio Domingo Rubio. No obstante algunos de los datos se verán desactualizados como la fecha en que comenzó a realizarse el método, sobre 1996, o los 2000 casos tratados, cuyo número a día de hoy ha aumentado ya a mas del doble.

Sin mas os dejo aquí la entrevista.

DSalud: Dice usted que ha concebido una técnica que resuelve o alivia los llamados cólicos del lactante en el 90% de los casos. ¿Cómo llegó a ella?

D.Rubio: Pues de forma un tanto casual. Verá, en mi consulta trabajamos la Osteopatía en sus tres niveles –estructural, visceral y sacrocraneal- y pensamos que cualquier problema que limite la calidad de vida se puede mejorar con ella. Pues bien, hace 8 años (*) aceptamos tratar al bebé de unos pacientes que lloraba todo el día y no comía. Como se puede imaginar los padres estaban tristes, cansados y algo abatidos porque nadie les daba más solución que tener paciencia así que aplicamos nuestros conocimientos de osteopatía visceral con el cuidado propio de cuando se hace algo por primera vez y con mayor motivo al tratarse de un bebé. Y no debimos hacerlo mal porque después de la sesión durmió toda la noche y comió correctamente.

DSalud: Pero, ¿qué hicieron exactamente?

D.Rubio: Algo tan simple como efectivo: mediante un movimiento cuidadoso de los dedos elastificamos el paquete visceral del bebé, desde el esfínter esofágico inferior de la entrada del estómago hasta el recto. Y al tercer día de tratamiento el bebé ya no presentaba ningún síntoma. Comía, dormía y eructaba sin problemas. A pesar de lo cual la madre estuvo trayéndolo todos los días durante la siguiente semana.

DSalud: ¿Y no volvió a tener síntomas nunca más?

D.Rubio: Ninguno. De hecho fue tan espectacular y rápida la solución que, aconsejados por estos padres, vinieron otros que nos trajeron a sus bebés con cólicos. Ello nos permitió ayudarles y de paso perfeccionar nuestro método y su efectividad.

DSalud:¿A cuántos niños han tratado hasta la fecha?

D.Rubio: A más de 2.000. Incluso hemos tratado a bebés que presentaban cólicos con tan sólo 4 días y algunos que los sufrían pese a haber cumplido un año.

DSalud:¿Con qué resultados?

D.Rubio: Muy buenos. Mire, con sólo dos sesiones que duran entre 30 y 45 minutos cada una separadas entre sí dos o tres días desaparecen definitivamente los cólicos en el 90% de los casos. El otro 10% tiene que acudir a una o dos sesiones más.

DSalud: Y dice que el método consiste en elastificar el paquete visceral del bebé. ¿Puede darnos más detalles?

D.Rubio: Lo que hacemos es, manualmente y con mucha suavidad, relajar y elastificar el intestino así como su sistema fascial, es decir, el contenido y el contenedor. Nosotros partimos de la base de que en el bebé se da una inmadurez del aparato digestivo y por eso incidimos en sus estructuras. En pocas palabras, tratamos de elastificar la zona de los intestinos para eliminar las tensiones y mejorar el tránsito intestinal. El movimiento de nuestras manos relaja la musculatura lisa del intestino, formada por una capa circular profunda y una capa longitudinal superficial. Este músculo, vigoroso y tónico, se encuentra en el origen de los movimientos peristálticos del intestino.

DSalud:¿Y qué presión hace falta ejercer para elastificar el intestino de un bebé?

D.Rubio: De entre 5 a 10 gramos por centímetro cuadrado. Con los dedos vamos “escuchando” y esperando la respuesta del cuerpo, trabajando de la zona más superficial a la más profunda, penetrando por capas a medida que el propio cuerpo nos deja. En la primera sesión intentamos elastificar la zona más externa y en la segunda, cuando ya observamos que la zona intestinal del bebé ha mejorado, trabajamos sobre la zona más profunda. En todo caso esta técnica sólo se puede realizar con éxito si el bebé está relajado. Es decir, que la presión que ejercemos no es en absoluto molesta. De lo que se trata es de que el bebé esté cómodo –algo que, creo, se puede apreciar en las fotografías- porque eso es clave para que el resultado sea positivo.

DSalud: ¿Y cuáles son los efectos inmediatos que se observan en el bebé?

D.Rubio: En los primeros meses de vida hay dos actividades básicas que influyen en el desarrollo y bienestar de todo bebé: comer y dormir. Y las dos mejoran cuando desaparecen los cólicos. Cuando el bebé deja de llorar desesperadamente mejora la calidad de su sueño y la calidad de sus tomas. Pues bien, con este método se resuelven los cólicos y, por tanto, los efectos positivos para ambas actividades son inmediatos. Por ejemplo, la terapia mejora todas las funciones relacionadas tanto con la alimentación del bebé -que realiza tomas más correctas y mantiene mejor el tiempo entre ellas- como con la asimilación de los nutrientes y la eliminación de gases y heces. Además se observa mayor facilidad para el eructo y, como efecto secundario, se consigue un aumento en su bienestar general al mejorar el tiempo y la calidad de sueño y de descanso.

DSalud: ¿Y no sufren los bebés durante el tratamiento?

D.Rubio: No deben pasarlo muy mal porque algunos hasta se quedan dormidos durante la sesión. Normalmente están relajados y a gusto. De hecho no podemos trabajar bien si el bebé está llorando o intranquilo.

DSalud: ¿Y los padres pueden aprender esta técnica?

D.Rubio: No, porque para practicar este método se necesita un conocimiento en profundidad de anatomía visceral y tener la sensibilidad de un terapeuta manual entrenado.  Y eso sólo se consigue con años de experiencia. La terapia debe aplicarla alguien experimentado.

DSalud: Entendemos. Felicidades pues por una técnica tan útil, sencilla e inocua. Estamos seguros de que interesará a muchos padres desesperados e insomnes a causa de los llantos incesantes de sus bebés. Gracias por su amabilidad.

D.Rubio: A ustedes.

 

Fuente: Revista DSalud nº82, abril 2006